Ultimamente las noticias no nos alegran precisamente la vida, entre el lastre de la crisis, las estadísticas obscenas sobre los niveles de paro y las actuaciones bancarias, el timo de la gripe A, y por si fuera poco la tragedia de Haití que nos obliga a desviar la mirada de otras tragedias aún calientes a lo largo y ancho de Africa y Oriente Medio, sin olvidar la amenaza terrorista y la violencia doméstica, entre otros sufrimientos… tenemos el optimismo por los suelos.
Esta semana dos noticias me han llamado la atención. La primera es la referente a la Generación NINI, bonito nombre para una situación lamentable. La Generación NINI es esa generación de jóvenes que NI estudian, NI trabajan, no como consecuencia del paro, sino como elección, como proyecto de vida (si es que saben lo que es eso…) se apoltronan en casa de sus padres y pretenden que estos les mantengan de por vida mientras van pasando los días de juerga en juerga, buscando la forma de perpetuar la adolescencia y escapar por la vía fácil … y ¡¡esa es la generación que deberá guiar y cuidar nuestros destinos el día de mañana cuando ya estemos fuera de la vida activa !! Yo no sé Vds. pero a mi la perspectiva me da pánico (me imagino el futuro como en aquellas películas de Mad Max…). Menos mal que quedan algunos fuera del rebaño, que piensan y actúan con sentido común tratando de formarse para afrontar los retos por venir y que no se han contagiado de esos frikis que escupen virus letales por toda la telebasura fomentando un hedonismo barato (y hediondismo*, que dirían en Canarias) a ultranza, totalmente vomitivo…
La segunda noticia de la semana, la verdad, es que no sé como calificarla… El titular es el siguiente: “Condenada a ocho meses de prisión una mujer por gritar demasiado mientras hace el amor”, cuando lo leí por primera vez me reí pensando que era una broma, desgraciadamente cuando seguí leyendo me dí cuenta que era veraz y de lo más serio. Al parecer, se trata de una señora inglesa que suele expresar de forma muy sonora y efusiva sus emociones durante el acto sexual, lo cual molesta mucho a sus vecinos, hasta el punto de que el asunto ha llegado a los tribunales y un juez ha dictaminado que la señora va a tener que ingresar en la cárcel por tal “espantoso e imperdonable delito”. ¡Cielos! hasta donde vamos a llegar en la intolerancia y las limitaciones de nuestras libertades básicas y demás faltas de respeto a la intimidad… por si fuera poco ya lo de las medidas de seguridad en los viajes, cuya finalidad tiene desgraciadamente sentido, ¡¡ ahora los amantes efusivos van a tener que usar bozal !!
Y digo yo, conforme está el patio, con el agobio de la crisis con todos sus corolarios y la incertidumbre del devenir, si ni siquiera se va a poder explayar un@ en la cama… apaga y vámonos!
*(La palabra hediondo en canario, se pronuncia: jediondo y tiene un significado afín a guarro, sucio y asqueroso).
Aquí les dejo algunas fotos de esta semana, las demás están en mi galería de Flickr.
Au sujet des NINI ça a toujours existé c'est la faute des parents .Quant a cette pauvre femme se retrouver en prison pour sa façon d'exprimer son plaisir ,le juge n'est pas juste ou alors il est jaloux que sa compagne ne le fait pas .
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