viernes, 31 de julio de 2015

Presencia


¿Dónde debo buscar la iluminación?.

- Aquí.

- ¿Y cuándo tendrá lugar?.

- Está teniendo lugar ahora mismo.

- Entonces, ¿por qué no la siento?.

- Porque no miras.

- ¿Y en que debo fijarme?.

- En nada. Simplemente mira.

- Mirar ¿qué?.

- Cualquier cosa en la que se posen tus ojos.

- ¿Y debo mirar de alguna manera especial?.

- No. Bastará con que mires normalmente.

- Pero ¿es que no miro siempre normalmente?.

- No.

- ¿Por qué demonios…?

- Porque para mirar tienes que estar aquí, y casi siempre no lo estás.
Fuente: ¿Quién puede hacer que amanezca? de Anthony de Mello


viernes, 17 de julio de 2015

Un mundo feliz





















Estos días me ha dado por re-leer la obra de Aldous Huxley Un mundo feliz. Esta novela ya la leí siendo muy joven al final de mi adolescencia y recuerdo que ya en su momento me dejó una profunda huella, pero entonces en mi  inocencia pensé que la ciencia ficción era sólo eso, ficción. En esta nueva lectura al cabo de muchos años, después de haber leído mucho, aprendido algo y vivido bastante, la verdad es que mi percepción de la obra es muy  diferente.

En un mundo en crisis en el que estamos todos inmersos me maravilla la anticipación del autor que escribió la novela en 1931 y que supo captar la esencia del ser humano desde la visión de su mundo, que salía de una primera guerra mundial y donde despuntaban avances científicos de dudosas aplicaciones.

No quisiera descubrir – o como se dice ahora hacer un spoiler - del texto para los que no lo conocen y que bien merece la lectura. Pero sí recordar que independientemente de la manipulación genética en la que se basa la novela para  describir todo un sistema de castas de los grupos, que me cuesta llamar humanos, adiestrados en hábitos obsesivos y compulsivos. Llama la atención su descripción de la manipulación emocional mediante instrucciones hipnóticas implantadas desde la infancia y el machaqueo constante de lo que se debe hacer y no hacer según las directrices de unos dirigentes, igualmente manipulados por cierto, de ese mundo que vigilan donde todo se hace de forma muy estructurada en pos de una supuesta felicidad, pero con una falta total de libertad. La educación, eso sí muy parcial esta destinada a la categoría más alta, la búsqueda de conocimiento esta desacreditada y se fomenta mucho más la diversión, el sexo y el deporte así como el uso de drogas.

En el fondo es muy parecido a lo que está sucediendo en nuestro mundo en crisis donde algunos grupos  desde las esferas del poder ejercen presión sobre el resto de los mortales creando subgrupos que van manipulando y utilizando a su antojo y en función de sus necesidades. Se desvaloriza la educación, se dificulta el acceso a la sanidad, se menosprecia el envejecimiento, se ensalza el hedonismo y la vulgaridad, se crean o se mantienen países enteros en situación de subdesarrollo para poderles explotar mejor, etc...

No obstante, en el momento presente disponemos de redes sociales a través de Internet, posiblemente uno de los pocos resquicios de libertad que permiten estar al tanto instantáneamente de cualquier cosa que suceda en el mundo, estar conectados, descubrir acciones fraudulentas, corruptas o injustas, apoyarnos y poder expresarnos. Pero ya algunos países han empezado a cerrar esa posibilidad, e incluso los países supuestamente democráticos están viendo la forma de controlarlo, haciendo que toda esa información a la que accedemos de forma instantánea y gratuita o casi, se convierta en un artículo de lujo por el cual haya que pagar mucho más, y volvemos a lo de siempre anulando a los más desfavorecidos y beneficiando a los más pudientes.

Por todo esto viendo como se están poniendo la cosas, creo que es necesaria una valiente y honda reflexión para decidir sobre lo que queremos para un futuro que no es ninguna ficción y donde podamos vivir que no es sobrevivir  y conseguir que las cosas cambien realmente de forma más equitativa y beneficiosa para todos.



Palabras


Los discípulos estaban enzarzados en una discusión sobre la sentencia de Lao Tse: Los que saben no hablan; Los que hablan no saben.
Cuando el Maestro entró donde aquellos estaban, le preguntaron cuál era el significado exacto de aquellas palabras. El Maestro les dijo:
- ¿Quién de vosotros conoce la fragancia de la rosa?
Todos la conocían. Entonces les dijo:
- Expresadlo con palabras.
Y todos guardaron silencio.
Fuente: ¿Quién puede hacer que amanezca? de Anthony de Mello


viernes, 3 de julio de 2015

Recordando a Maimónides












Maimonides fue un célebre médico, rabino, teólogo y filósofo judió que nació en Córdoba en la Edad Media, en el siglo XII, si bien pasó gran parte de su vida y murió en Egipto. Era un hombre muy ilustrado que escribió sobre medicina y también sobre filosofía. A continuación os dejo una muestra de sus escritos que nos pueden servir como base de reflexión o meditación:

“Oh Dios, llena mi alma de amor por mi arte y por todas las criaturas.
Que no admita que la sed de ganancia y el afán de gloria me influencien en el ejercicio de mi arte, porque los enemigos de la verdad y del amor de los hombres podrían fácilmente hacerme abusar y apartarme de hacer bien a tus hijos.

Sostén la fuerza de mi corazón para que esté siempre pronto a servir al pobre y al rico, al amigo y al enemigo, al bueno y al malo.

Haz que no vea en el hombre más que al que sufre.

Que mi espíritu se mantenga claro en el lecho del enfermo, que no se distraiga por cualquier pensamiento extraño, para que tenga presente todo lo que la experiencia y la ciencia le enseñaron; porque grandes y sublimes son los progresos de la ciencia que tienen como finalidad conservar la salud y la vida de todas las criaturas.

Haz que mis pacientes tengan confianza en mí y en mi arte y que sigan mis consejos y prescripciones.

Aleja del lecho de mis pacientes a los charlatanes, al ejército de parientes que dan mil consejos y a aquéllos que saben siempre todo; porque es una injerencia peligrosa que, por vanidad, hace malograr las mejores intenciones y lleva muchas veces a la muerte.

Si los ignorantes me censuran y escarnecen, otórgarne que el amor de mi arte, como una coraza, me torne invulnerable, para que pueda perseverar en la verdad sin atender al prestigio, al renombre y a la edad de mis detractores. Otórgame, Dios mío, la indulgencia y la paciencia necesaria al lado de los pacientes apasionados o groseros.

Haz que sea moderado en todo, pero insaciable en mi amor por la ciencia. Aparta de mí la idea de que lo puedo todo.

Dame la fuerza, la voluntad y la ocasión para ampliar cada vez más mis conocimientos.

Que pueda hoy descubrir en mi saber cosas que ayer no sospechaba, porque el arte es grande, pero el espíritu del hombre puede avanzar siempre más adelante.”

 (En relación a los animales y sus crías), no hay diferencia entre el dolor que sienten los seres humanos y el dolor de otros seres vivos, puesto que el amor y la ternura de la madre para sus hijos no son producidos por el razonamiento, sino por los sentimientos, y esta facultad existe no solamente en los seres humanos sino en la mayoría de los seres vivos.