viernes, 3 de noviembre de 2017

El Samurái y los tres gatos


Un samurai tenía en su casa un ratón del que no llegaba a desembarazarse. Entonces adquirió un magnifico gato, robusto y valiente. Pero el ratón, más rápido, se burlaba de el. Entonces el samurai tomo otro gato, malicioso y astuto. Pero el ratón desconfió de el y no daba señales de vida mas que cuando este dormía.
Un monje Zen del templo vecino presto entonces al samurai su gato: este tenía un aspecto mediocre, dormía todo el tiempo, indiferente a lo que le rodeaba. El samurai encogió los hombros, pero el monje insistió para que lo dejara en su casa. 
El gato se pasaba el día durmiendo, y muy pronto, el ratón se envalentono de nuevo: pasaba y volvía a pasar por delante del gato, visiblemente indiferente. Pero un día, súbitamente, de un solo zarpazo, el gato lo atrapo y lo mató.

¡Poder del cuerpo, habilidad de la técnica no son nada sin la vigilancia del espíritu!


2 comentarios:

  1. Pobre raton lo que ace de acercarse del gato dormiente. Pero es que no dormia siempre !!!!!

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  2. Como siempre: amena, interesante y didáctica....

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