viernes, 19 de julio de 2013

La vida del artista

Crisis. Hoy no me refiero solo a la económica. Me refiere a las crisis periódicas que  asedian a cualquier persona con  inquietudes a lo largo de su vida.

Creo que la mejor forma de superar las crisis personales está en encontrar aquello que nos motiva especialmente, aquello que nos hace vibrar, sentirnos vivos, fluir, lo que nos apasiona, en fin, como quieran llamarlo.

Todos tenemos una pasión aunque muchos no sean plenamente conscientes de ello. Muchos no lo tienen claro y me preguntan como descubrirlo. En el fondo ellos ya lo saben, porque lo han experimentado pero aún no se lo creen, porque para ellos ha sido algo tan normal, tan sencillo entrar en ello, hacerlo que no se lo creen!

Lo que nos apasiona es precisamente aquello que hacemos con toda naturalidad, a menudo no tiene nada que ver con nuestra actividad diaria, ni con la imagen que damos de nosotros mismos. Si, por si no lo sabían una es la imagen que queremos dar de nosotros mismos y otra la perciben los demás, pero de eso hablaremos otro día.

Volviendo a lo que nos apasiona, se trata de algo que es importante para nosotros, cosas que  manejamos o entendemos intuitivamente y que nos gusta hacer. Es algo que anida muy profundamente dentro de nosotros, que realizamos sin esfuerzo y que nos hace sentir bien.

Lo que nos apasiona es en el fondo, lo que somos, es parte de lo que  define nuestra personalidad, y puede ser cualquier cosa, desde algo que nos resulta insignificante, hasta algo que puede tener hondas repercusiones en la evolución y desarrollo de la sociedad, en cierto modo es nuestro don, aquello para lo cual hemos venido a este mundo.

En períodos de crisis como el que vivimos ahora, en los que con frecuencia uno tiene que buscarse la vida cuando los mecanismos de la sociedad  fallan y lo dejan desamparado, el conocer nuestro don puede sacarnos del apuro, puede convertirse en una fuente de ingresos que nos permitirá salir adelante.

En esos momentos es importante estar atentos a los comentarios de los demás, al hacer esas cosas que tan sencillas nos resultan y que tan bien nos salen, porque nos pueden hace caer en la cuenta de lo que estamos haciendo y también de cómo lo hacemos. Posteriormente podemos plantearnos la posibilidad de rentabilizar ese don, convertirlo en una  profesión o una actividad laboral. Para ello deberemos dar los pasos necesarios formándonos, adquiriendo más experiencia, alcanzando un nivel de excelencia, lo cual no será  demasiado  difícil ya que estaremos haciendo algo  que nos gusta y nos motiva. Poco a poco nos daremos a conocer y los demás valorarán nuestro trabajo del cual podremos vivir.

De esta forma habremos conseguido lo que yo llamo “la vida del artista” es decir disfrutar y vivir de lo que más nos gusta hacer. ¿Hay algo mejor en la vida?





1 comentario:

  1. Todos llevamos un artista dentro aparece en el momento que estamos preparados.Antes no.

    ResponderEliminar